Tuesday, August 7, 2012

La palabra diaria, un momento de reflexion

El Conocimiento previo de Dios
Jeremías 1
4 Vino, pues, palabra de Jehová a mí, diciendo: Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones. Y yo dije: ¡Ah! ¡Ah, Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño.
5Y me dijo Jehová: No digas: Soy un niño; porque a todo lo que te envíe irás tú, y dirás todo lo que te mande.
Comentario:
Ah! Dios grande el nuestro (digo el nuestro, debido a que otros no le reconocen como a Dios, y otros tienen otros dioses, no que haya otro dios, sino solo Jehová). Los padres que conocen a sus hijos desde la niñez no los conocen a cabalidad aun cuando estos son adultos, Dios sin embargo profesa conocernos antes de haber nacidos. En el verso 4 de Jeremías nos describe algo tan extraordinario como único; notemos que Dios le comunica a Jeremías de un conocimiento de su persona previo a ser concebido; cuando Dios dice antes de que te formases en el vientre, está hablando de un tiempo antes de este haber sido engendrado, es decir aun concebido. El feto aun cuando no tiene forma de“persona” sin embargo tiene “forma”, Dios no obstante habla a un tiempo antes de tener forma, es decir antes de él existir!!! “Antes de que te formase“ sólo es posible cuando este no existía, de otra manera tuviese forma, aunque no fuese la de un ser humano ya desarrollado.
El misterio de Dios conocer a Jeremías, y de hecho a todo ser humano antes de que naciese no está refiriéndose a que teníamos una vida previa a esta, o de que existíamos antes de nuestra existencia, y que meramente nos olvidamos, (esto no se refiere a reencarnación); esta noción de conocimiento de Dios de nuestras vidas aun antes de nacer establece la omnisciencia de Dios, es decir, el futuro, el pasado y el presente no indican tiempos diferentes para el (esto es difícil de entender y aun más problemático explicar) pero meramente se refiere a que Dios está fuera del tiempo, y nuestro futuro le es conocido a él como si fuese pasado. Notemos algo interesante: Dios le dice a jeremías “antes de que te formases en el vientre de tu madre te conocí “ el verbo conocer aquí está en pasado!! Es decir Dios conoció a una persona que aun no existía, el nacimiento de Jeremías y lo que habría de ser, y hacer no era secreto para Dios pues ya lo sabía. Miremos una película, luego veámosla de nuevo, sabemos exactamente lo que ha de suceder, ya que la hemos visto; esto es un ejemplo minúsculo de la capacidad de ciencia y conocimiento de Dios.
“Antes de que naciese te santifique, te di por profeta a las naciones”; todas estas palabras están en futuro, aun cuando se trataba del pasado, es decir Jeremías YA FUE (para Dios), LO QUE AUN NI HABIA SIDO. En nuestra típica ignorancia Jeremías replica que él era niño por que le faltaba conocimiento, o porque meramente se sentía incapaz de hacer lo que se le demandaba. A veces nuestro mayor problema es no escuchar lo que Dios nos dice, si él nos declara reyes y sacerdotes, eso somos, pero nos seguimos viendo diferente, si él nos declara nación santa pueblo escogido eso somos. Si alguien ha visto una película, le contradiríamos acerca de lo que sucederá en la película? Apostaríamos contra el que ya sabe lo que ha de suceder? Claro que no!! Entonces porque contender con el que nos conoció aun antes de haber nacido, y conoce el propósito que tiene para nuestras vidas? Dios le dice a Jeremías algo, que en si no es un mandato, el meramente está diciendo lo que ya había visto a Jeremías hacer “porque todo lo que te envié iras tu, y dirás lo que te mande” en las memorias de Dios estaba fresco lo que ya él había visto a Jeremías hacer, por ende le dice, déjate de decir que eres niño porque ya te he visto hacer esto, y se de lo que eres capaz. Dios lo conoce todo, lo sabe todo, es mejor dejar nuestras vidas en las manos de aquel que ya conoce de antes manos el potencial que aun nosotros desconocemos que tenemos

Sacrificando Para expiación

Sacrificando Para expiación
Levítico
3 Si su ofrenda fuere holocausto vacuno, macho sin defecto lo ofrecerá; de su voluntad lo ofrecerá a la puerta del tabernáculo de reunión delante de Jehová. Y pondrá su mano sobre la cabeza del holocausto, y será aceptado para expiación suya.

Comentario:
No hay sacrificio que no duela; el sacrificio ofrecido por el pueblo de Israel, dolía tanto al animal que era sacrificado como al que sacrificaba pues era de su pertenencia, y lo mejor que tenia (macho sin defecto). Al ser Macho y sin defecto ocasionaba que el dueño no tendría más descendencia de tal animal sino que debería de ser el mejor pues tenía que ser sin defecto. Tales ofrendas deberían ser voluntarias, es decir, cada persona que deseaba sacrificio por expiación de pecados, debería primero reconocer sus pecados, y luego voluntariamente ofrecer sacrificio, y una vez habiendo reconocido sus pecados, y ofrecido voluntariamente ofrenda acepta a Dios (macho sin defecto) entonces eran expiados sus pecados.
Bajo la gracia no ofrecemos sacrificios de animales a Dios, el hacer esto sería invalidar el derramamiento de sangre que Jesus hizo por nosotros, este fue el cordero, limpio sin defecto, que se ofreció voluntariamente por los pecados del mundo. Jesus era sin defecto, y se ofreció voluntariamente, esto era necesario para que nuestros pecados pudiesen ser perdonados, ahora bien, aunque ya tenemos el cordero de la expiación en Cristo, necesitamos nosotros ahora reconocer nuestros pecados, y sacrificarlos juntamente con Cristo para que estos sean expiados. Si no reconocemos nuestras faltas, tampoco ofreceremos dicho pecado para sacrificio; ahora porque llamo el ofrecer tales pecados sacrificio? Porque de una manera u otra es algo que nos gusta. Todo aquello que nos gusta y va en contra de la voluntad de Dios debe ser ofrecido en sacrificio (para que muera el pecado) y debe ser hecho voluntariamente, no por mandamiento del pastor, líder o algún familiar.
Cualquiera que fuere nuestros pecados, debemos de cortarle la cabeza, porque al cortar cualquier otra parte surgirá de nuevo. Debemos de entender que las cosas pecaminosas es las cosas que nos gustan, y al no ponerse firme y rechazar al enemigo, no va a huir de nosotros. A Dios le interesa un sacrificio vivo, santo, ofrecido voluntariamente, de un corazón contrito y humillado que ha reconocido que necesita el perdón, y la restauración a un estado de santidad. El que seas cristiano, no indica que eres perfecto, y hay males entre la carne metida en los huesos que necesitan ser entregados a Dios, y una vez libres del pecado que nos asedia podremos correr la carrera con más libertad y obviamente más facilidad.