Monday, August 29, 2011

Oración de arrepentimiento
Salmos 51
1 Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. 2 Lávame más y más de mi maldad, Y límpiame de mi pecado. 3 Porque yo reconozco mis rebeliones, Y mi pecado está siempre delante de mí. 4 Contra ti, contra ti solo he pecado, Y he hecho lo malo delante de tus ojos; Para que seas reconocido justo en tu palabra, Y tenido por puro en tu juicio.
Comentario:
                     Este salmo es quizás el mejor ejemplo en todas las escrituras de un corazón arrepentido, y el mejor guía de como venir a Dios después de cometer un pecado. David, había pecado contra Dios al haberse llegado a Betsabe y enviado a Urias su esposo a morir en la guerra. Es sorprendente que un hombre con el corazón conforme a la voluntad de Dios ( 1 Samuel 13:14)  hubiese cometido tal pecado. Pero una lección bien importante se aprende en esto, ya sea que el pecado ciega a las personas ( al parecer David desconocía que había pecado, 2 Samuel 12: 1-5) O uno mismo escoja pasar por alto lo hecho, David mostro una arrepentimiento inmediato al ser amonestado por Natan.
En el primer verso David se encuentra pidiéndole piedad a Dios conforme a su misericordia, esto es de gran importancia, ya que si no hubiese sido conforme a la misericordia de Dios, la muerte le esperaba. Si no fuese por su misericordia ya todos hubiésemos sido consumidos. David reconoció la gravedad de su pecado y se sentía sucio, quería que Dios lo lavara de su maldad, esto es quitar por completo de su presencia lo que el había cometido contra Dios, y quedar limpio de ese pecado como si nunca lo hubiese cometido. Aunque esto parece ser imposible, para Dios no lo es. El es el único capaz de perdonar de tal forma que se olvida por completo de lo cometido y nos mira justos después de habernos arrepentido de corazón.
La importancia de reconocer nuestras rebeliones es de imprescindible necesidad para todo cristiano, ya que si no es así, acumulamos pecados y por ende ira de parte de Dios. ( y mi pecado esta delante de mi) esto sugiere  que David no podía estar tranquilo, su conciencia le molestaba al haber hecho tal cosa. El ofender a alguien, o cualquier tipo de ofensa requiere pedir perdón dos veces, al ofendido, y a Dios, ya que al ofender y hacer algo malo también se le ofende a Dios. El no pecar es imposible para nosotros los imperfectos, mientras estemos en la tierra, pero a los que pecan la palabra dice que tenemos a Jesus el justo de abogado.