Ataques “invisibles”

2 Corintios 2

11 para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones.

Comentario:

En la Guerra sin cuartel que estamos batallando contras las huestes de la oscuridad, hay ataques que vienen desapercibidos. Desapercibidos para quienes no están velando completamente por estos ataques. Te has levantado alguna vez de poco humor, aun cuando nadie ni nada te ha molestado? Esta el enemigo frustrando tu carácter? Lo problemático de nuestra situación es que el enemigo utiliza las cosas “normales” de nuestra naturaleza humana para doblegarnos si le dejamos; notemos los siguiente sentimientos de dudas, temores, celos, ira, incomodidades, envidias, entre otras, tales cosas son “normales” en la naturaleza humana, sin embargo algunas de ellas pecaminosas, y el enemigo las utiliza para apartarnos de Dios. Por ejemplo la duda y el temor son señales obvias de falta de fe, y cuando lo confesamos dejamos saber al enemigo que sus dardos dieron en el blanco; la ira envidia son malas consejeras y frutos de la carne.

La biblia dice que no nos ha venido ninguna tentación que no sea humana(1 Corintios 10:13), es decir todas las tentaciones que podemos tener son “naturales” de la carne, por esto a veces son invisibles y desapercibidas, pero el hecho de que sean humanas también indican que podemos resistirlas, ya que no son de índole sobrenatural. En 2 Corintios 11:13 nos dice que el mismo Satanás se disfraza de ángel de luz así camuflajea sus ataques, al estos estar camuflajiados no nos percatamos que su fin es destruirnos y muchas veces nos ponemos al blanco de tales dardos. El enemigo jamás nos ataca vestido de un hombre rojo, con cola y cuernos, eso sería obvio, más bien comienza a utilizar nuestros propios deseos y debilidades y así termina destruyéndonos si no nos protegemos.

La biblia nos habla de una armadura que sirve para detener estos ataques; en el libro de Efesios 6: 12-18 nos indica las partes de esta armadura y la protección que ofrece. Queramos o no estamos en una guerra espiritual y si no utilizamos las armaduras necesarias pereceremos. En 2 Corintios 2:11 Pablo habla acerca del perdón, y de su disponibilidad de perdonar de inmediato y no albergar ningún tipo de sentimientos bélicos, esto hacia porque conocía las herramientas, ataques o dardos del enemigo y no quería que teniendo el algún sentimiento “normal de la carne” contra alguien que le hubiese ofendido, que Satanás entonces ganase algún tipo de ventaja. La forma rápida y eficiente con que pablo hacia esto, era el resultado de conocer las maquinaciones del enemigo (verso 11) muchas veces estamos siendo asaltados con “dardos invisibles” pero esto solo ocurre por nuestra falta de conocimiento, Dios mismo noto que su pueblo perecía por qué no tenía el conocimiento apropiado (Oseas 4:6) como Pablo no ignoraba tales maquinaciones era presto en protegerse pero el que desconoce caerá herido y hasta de muerte.