Friday, June 24, 2011

Para Pastores y lideres

1 Pedro 5

1 Ruego a los ancianos que están entre vosotros, yo anciano también con ellos, y testigo de los padecimientos de Cristo, que soy también participante de la gloria que será revelada:
2 Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto;
3 no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey.
4 Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria.

Comentario:

Pedro se dirige directamente al liderazgo de la iglesia, especialmente a los Pastores: “ruego a los ancianos que están entre vosotros”; la palabra anciano aquí se refiere al liderato, no necesariamente a ancianos en años, si no ancianos en madurez espiritual. Es posible que fuesen ancianos literales pero Pedro se dirige a ellos como líderes y pastores de la iglesia. Pedro si incluye a si mismo entre estos, como testigo ocular de los padecimientos de Cristo, habiendo caminado y habiendo presenciado los sufrimientos de Jesús, es posible que a su mente vino la escena donde Jesús fue apresado y el le seguía de lejos (Mateo 26:57-58). Aun Pedro le había negado tres veces, y había llorado amargamente por ello (Mateo 26: 69-75), Pedro recordó la encomienda de su maestro, salvador y amigo, cuando le dijo: “Pedro si me amas apacienta mis ovejas” (Juan 21:17)

En el verso 2, Pedro le ordena a los pastores de la iglesia lo mismo que Jesus le había ordenado. Lo que aprendió del maestro, ahora a su vez le enseña a los pastores de la iglesia diciéndole que apacienten la grey de Dios que estaba entre ellos, cuidando de ella, protegiéndola. Es necesario señalar que la analogía de un pastor de ovejas siempre se ha utilizado para representar a los pastores con la iglesia; la razón de esto es que las ovejas, en el reino animal son las más mansas, e ineptas para cuidarse a sí misma. El pastor está encargado de cuidarlas a diario, darle de comer y de beber todos los días. Las ovejas producen una “lana” espesa la cual tiene que ser quitada por los pastores, si no es así, esta lana al caer agua, y con la suciedad del campo se pone pesada haciendo imposible para la oveja aun caminar, y seguir adelante, es decir el pastor tiene que ayudar, aliviar (quitar) la carga de sus ovejas. El pastor de la iglesia debe de igual manera cuidar de los miembros y hacer más ligera su carga.

Pedro nota algo bien clave al ordenar a los pastores a apacentad la grey de Dios: “no por fuerza, sino voluntariamente: no por ganancia deshonesta sino con ánimo pronto” es decir, el cuido de las ovejas no es algo por obligación, a la fuerza sino debe ser voluntariamente sabiendo que tal responsabilidad es de parte de Dios no de hombre. No debe ser tampoco por ganancia deshonesta, por algún dinero que se le vaya a pagar sino que sea voluntariamente y con ánimo. En el verso 3 Pedro concluye diciendo que aun sean pastores de la iglesia cuídense de hacer tal cosa como si fuesen “jefes” (como teniendo señorío) o capataces, siempre listo para mandar, demandando de ellos sin primero ser ejemplo. Un sin número de pastores se ven como los “jefes” de la iglesia, donde se hace lo que ellos dictan, no sabiendo que el organigrama de la iglesia es diferente a la de un negocio secular, donde el jefe manda y es servido por los demás, en la iglesia sin embargo el pastor es el servidor, y no esta meramente para ser servido, de esto tenemos a Jesús mismo como ejemplo siendo pastor de todos, vino a servir y no a ser servido. En el verso 4 entonces nos indica que una vez este príncipe de pastores ( Jesus ) aparezca coronaria a aquellos que apacentaron la grey debidamente.