Thursday, June 10, 2010

Conociendo la voz de Dios (2da parte)

San Juan 4

10 Respondió Jesús y le dijo: Si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: Dame de beber; tú le pedirías, y él te daría agua viva.

Comentario:

Un ingrediente imprescindible para conocer la voz de Dios, es conocerle a Él, primero. Nadie jamás reconoce la voz de alguien a quien no conoce. Hacer a una persona escuchar la voz de alguien que no conoce no le hará conocerle, más bien debe conocer la persona primero. Debido a esto, es necesario entonces conocer a Dios, y luego de conocerle a él, conoceremos su voz. Si sabes que Dios es amor (1 Juan 4:8) entonces conoceremos que cuando se nos demanda que nos amemos los unos a los otros, esta debe ser la voz de Dios; pero si alguien dice debemos amar a los que nos aman, y aborrecer a los que nos aborrecen de inmediato sabremos que esta no es la voz de Dios ya que él es amor. Muchas veces conocemos a alguna persona y escuchamos algo que esta persona, supuestamente dijo, solamente porque le conocemos podemos saber si tal persona dijo tal dicho o no, de la misma manera sabremos lo que proviene de Dios, y lo que no proviene de Él, si le conocemos a Él.

En el verso 10 de Juan vemos una situación ejemplar. La samaritana no conocía a Jesus por lo tanto no conocía la voz del que le hablaba, Jesus mismo le dijo: "si conocieras en don de Dios y quien es el que te dice: dame de beber tu le pedirías y el te daría el agua viva". Hay una gran desventaja en no conocer a Dios. Si le conoces, si deberás le conociéramos cuando la palabra dice: "pedid y se os dará, buscad y hallareis, llamad y se os abrirá" (San Mateo 7:7) entonces pediríamos sin lugar a duda porque conocemos quien es El, y sabemos que la voz del que sugiere que pidamos es la de Él, pero al no conocerle a veces pensamos que es imposible pedir cualquier cosa y obtenerla, porque desconocemos su majestad y poder. Vemos a diario cantidad de personas que conoce la palabra, pero no la vive, muchas personas tienen gran conocimiento de las escrituras, y argumentan sobre ella pero no cumplen lo que esta dice, porque es esto? Porque tales personas conociendo la voz, no conocen el autor de ella, y hay que conocerle a Él, no meramente saber sus palabras. Conozcamos pues el autor de la vida (Dios), y luego sin duda conoceremos cual es su voz.