Dejándose guiar por Dios

Juan 1

12 Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar.

13 Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir

Comentario:

A menudo notamos que nuestros pasos no están siguiendo una trayectoria recta; a nosotros mismo nos disgusta la manera en que somos, nuestro proceder. El resultado de nuestras acciones a menudo son contrarias a lo que deseamos, muchos estamos llenos de enojos, amarguras o rencores, y a veces no sabemos por qué. Si nuestros propios pasos nos parecen mal, ¿cuanto más nos encontraríamos estando en contra de la palabra de Dios? Pablo en una ocasión dijo: "Porque sabemos que la ley es espiritual; mas yo soy carnal, vendido al pecado. Porque lo que hago, no lo entiendo; pues no hago lo que quiero, sino lo que aborrezco, eso hago. Y si lo que no quiero, esto hago, apruebo que la ley es buena" (Romanos 7:14-16); Pablo indicaba que aborrecía lo que hacía, y la ley también estaba opuesto a tal cosa, por lo tanto no le quedaba otra de decir que la ley, -esto es la palabra de Dios- es buena.

Hace poco estaba conduciendo y textiando a la vez, tal cosa es contra la ley (de hecho no lo hago mas y aconsejo a que nadie lo haga) y recuerdo viendo un anuncio que decía " no manejar y textiar" me di cuenta que tal ley era buena, porque lo que hacía era peligroso, y si esta ley es buena y es terrenal cuanto más la de Dios. La pregunta obvia seria: ¿cómo nos dejaremos guiar de Dios? ¿Cómo hacer su voluntad? muchas veces leemos la palabra y nos sentimos que no estamos haciendo nada en contra de su palabra pero aun así estamos confusos, y caminando sin un rumbo determinado; de hecho a veces no sabes si estamos en la verdad. ¿Cómo podemos saber si nos estamos dejando guiar por Dios o por caprichos propios?, después de todo la biblia dice que hay muchos caminos que al hombre le parecen rectos pero su fin son de perdición (Proverbios 16:25).

Muchas personas en estos casos llaman a "profetas", consejeros, ministros etc., para que les conduzcan por el camino debido, estos son los momentos más vulnerables en la vida de un cristiano, ya que puede ser llevado por cualquier viento de doctrina falsa. ¿Cual entonces seria nuestro auxilio, cuando poseyendo la palabra no sabemos cuál es la verdad?, o estamos confusos de cómo seguir a Dios? en el libro de Juan nos da la respuesta: “hay cosas que tengo que decirles, pero es mucho para sobrellevar, pero cuando venga el espíritu santo el os guiara a toda verdad" El espíritu santo no está ni para remplazar ni para invalidar la palabra de Dios, sino mas bien para complementarla; el Espíritu Santo jamás dirá algo opuesto a lo que está en la biblia, pero si nos ayudara a entender lo que dice la palabra de Dios, de manera que podemos seguir sus pasos con toda seguridad. Nunca debes pedir en oración al Espíritu Santo que te revele algo que ya la biblia establece como pecado, porque el espíritu santo no dirá nada que vaya en contra de la palabra si escuchas otra voz que te dice que está bien...es otro quien guía tus pasos.