Wednesday, October 26, 2011

Babilonia (1era parte)

Génesis 10

8 Y Cus engendró a Nimrod, quien llegó a ser el primer poderoso en la tierra.
9 Este fue vigoroso cazador delante de Jehová; por lo cual se dice: Así como Nimrod, vigoroso cazador delante de Jehová. 10 Y fue el comienzo de su reino Babel, Erec, Acad y Calne, en la tierra de Sinar.

Comentario:

Los versos del capítulo 10 de Génesis, trata con la descendencia de los hijos de Noé, Sem, Cam y Jafet. Sem es el padre de los Semitas (judíos e israelitas/árabes) Jafet padre de los Gentiles ( romanos/ europeos) , y Cam padre de los canitas (africanos/Asia). A uno de los hijos de Sem, Heber o Hebreo le nació un hijo llamado Peleg y en sus días fue repartida la tierra (verso 25), esto indica que la tierra fue dividida en aquel entonces entre los descendientes de estos tres hijos de Noé, de los cuales desciende toda la población global. En la descripción de la descendencia de Cam, el escritor hace una pausa en el verso 8 al describir a Nimrod (africano), esto es debido a que Nimrod fue el primer poderoso y grande en la tierra y mas que esto, fue el fundador del imperio Babilónico (verso 10).

Babilonia se caracteriza en la Biblia por ser un imperio opuesto completamente a Dios. Aquí se comienza todo culto pagano, idolatría, hechicería, y la adoración a ídolos, este imperio se encontraba en lo que hoy día es Irak. En el verso 9 no se le atribuye honra a Nimrod cuando dice " fue vigoroso cazador delante de Jehová" más bien describe el carácter malvado de este hombre que cazaba hombres (haciéndolos esclavos). El imperio babilónico se le atribuyo el llevar cautivo al pueblo de Israel, y destruir la casa de Jehová (2 reyes 25:1-21). Babilonia influyo a las demás naciones en sus abominaciones, de tal forma que aun Israel el pueblo de Dios hizo como ellos (2 Reyes 21:3-11). Es importante notar que nosotros como cristianos vivimos en una "babilonia" (mundo) espiritual, y si no somos cuidadosos podemos dejarnos influenciar por el mundo y sus actos paganos, estamos en el mundo, pero no pertenecemos a el.